Por qué mezclamos emociones y enfermedades. Te lo vamos a explicar.

Lo importante es que seas dueño de tu destino; que te hagas responsable de tu bienestar; que comprendas de dónde viene tu dolencia o malestar.

Con la “nueva genética” ya no se sostiene dar tanta importancia a los genes que te han transmitido… quizás te han transmitido “formas de amargarte la vida” o “estrategias para no enfrentarte a los problemas” o quizás ya “nazcas con una confusión importante”… eso sí deberías revisar, pero no le echemos la culpa de todo a los genes. Es muy cómodo pensar que “soy así irremediablemente y solo me queda aceptarlo y por supuesto medicarme para paliar mis síntomas”. Pensar así es un gran negocio para las multinacionales que manejan el capital del planeta. Pero internauta, yo creo que tú eres más sagaz.

¡Cambia el chip y vivirás más y mejor! Piensa en toda la historia de la humanidad, no somos portadores de una naturaleza impotente, todo lo contrario. Descubre cómo es tu naturaleza y te sorprenderá.

Hablemos sobre esa parte de NUESTRO YO que tantas veces malinterpretamos. Nuestra mente escondida, nuestra mente inconsciente. La que nos cuida y protege. La que almacena toda la experiencia vivida como especie y que ignoramos constantemente.

No me gusta hablar con términos técnicos ni demasiado específicos porque lo más importante es tener la capacidad de transmitir, no de presumir. Por eso podríamos definir a nuestro inconsciente como nuestro INSTINTO.

Emociones

No voy a dar una disertación sobre las emociones pero quédate con que finalmente son reacciones fisiológicas ante una idea o pensamiento. Y ese pensamiento o idea sobreviene tras una información o mensaje. Y esa información puede variar dependiendo del “cristal con el que se mire”. Una misma realidad inspira diferentes interpretaciones: saltar 10 metros desde un trampolín puede ser una gozada o llevarme al paroxismo, dependiendo de la interpretación que yo le dé a esa realidad.

Así que vamos a sacar de estas afirmaciones dos cosas:

• las reacciones fisiológicas de las que hablamos son moléculas, además de contracciones, dilataciones, retenciones, etc. Esas moléculas viajan por sangre y riegan las células de nuestro organismo. Esas moléculas benefician o perjudican a la célula y a sus reacciones.
• el cristal desde el que miramos se le denomina “mapa mental”. Una creencia del individuo hacia una realidad externa o interna.

Inconsciente

Pues a tenor de lo que estamos hablando no es más que esa fuerza interior que en base a la interpretación de la situación, te empuja o te retrae. Así pues, o subes alegremente hasta el trampolín para gozar la experiencia del salto; o por el contrario, sufres los efectos de una supuesta y probable muerte o lesión si te obligan a tirarte. Así vivimos, así nos movemos, así funcionamos. Debatiéndonos entre creencias capacitantes y creencias incapacitantes.

Enfermedades

Todos entendemos que una enfermedad es una situación corporal que impide el desarrollo exitoso de nuestras funciones fisiológicas o mentales. Se puede decir más alto pero no más claro. Y esas situaciones o características sobre vienen en el 95% de los casos por:

• hábitos de comportamiento
• hábitos alimenticios
• hábitos mentales
• hábitos emocionales

Y podríamos preguntarnos cómo sabemos si un hábito es incompatible con la SALUD. Pues no hay más que mirar nuestra programación genética como especie… ahora si es importante mirar nuestra genética.

Estamos programados para respirar oxigeno de la atmósfera pero no del agua, porque no tenemos branquias, tenemos pulmones.

Estamos programados para beber agua pero no alcohol… pues ya empezamos a tener pistas.

Estamos programados para caminar, subir a los árboles, etc, pero no para pasar sentados ocho horas al día en una silla.

¿Qué efectos pueden producir en nosotros estos “hábitos” contrarios a nuestra programación genética? Júzgalo tú mismo.

Pero hay otros hábitos de pensamiento que son tan perjudiciales como intentar respirar bajo el agua o beber solo alcohol en vez de agua.

Esos hábitos de pensamiento perjudiciales pueden resumirse en:

• miedo
• rabia
• aburrimiento o desinterés
• tristeza

Es normal sentir todo eso alguna vez pero no es capacitante mirar la vida por el cristal del miedo, de la rabia, de la tristeza o de la falta de motivación, a menudo. Estas emociones generarán químicos, moléculas, que inundarán nuestro torrente sanguíneo y complicarán nuestras funciones biológicas.

Observa la naturaleza, sus leyes, lo que permanece a través de los siglos, lo que hace sobrevivir a las especies… no necesitan medicamentos para sobrevivir, solo ser fieles al patrón original.

Ese es el mensaje de este post… si volvemos la mirada a la naturaleza, a nuestra naturaleza, encontraremos el equilibrio perdido. Ese que nos hemos buscado perder, libre y voluntariamente.

De eso trata la Naturopatia. Eso es lo que enseñamos. Y a pesar de darle importancia a la alimentación y a las plantas medicinales, a los masajes, también comprendemos que la “higiene mental” es la base del equilibrio.

Con Naturopatía Vivirás Más y Mejor

Adela Carrasco