Hombres y Mujeres: las vacaciones y qué hacer con ellas

Tanto hombres como mujeres se tiran a por las vacaciones pero no siempre saben qué es lo mejor para hacer con ellas.

Nosotros lo tenemos claro: conseguir calidad de vida y bienestar integral duradero.

A eso otros lo llaman «crecer». No importa como lo llamemos, lo importante es que sea útil y eficaz para nuestra vida cotidiana.

La reflexión es importante para :

  • ser libres
  • controlar nuestra vida
  • alcanzar los objetivos que verdaderamente nos importan

No tenemos tiempo… es una frase tan manida…

Ahora estás de vacaciones, y si no estás de vacaciones puedes darte vacaciones mentales. Y te das vacaciones mentales cuando eliges pensar en aquello que te produce o te producirá bienestar. Sentir paz interior es la mejor forma de descansar.

Cuando reflexionamos tendemos a dispersarnos, evadirnos, agobiarnos, obsesionarnos… por eso conviene tener una «guía» que nos inspire y nos facilite la labor.

Para nuestros «amados» hombres

Permítete un ratito de lectura y reflexión:

  1. ¿Qué parte de mí se siente constantemente atacada, incluso cuando nadie lo hace?
  2. ¿A quién estoy intentando demostrar algo… y por qué?
  3. ¿Qué estoy intentando demostrar exactamente?
  4. ¿Qué me está gritando mi mal humor que yo no quiero escuchar? Algo te quiere decir que no te gusta oír.
  5. ¿Qué me decepcionó tanto, que todavía me lo sigo cobrando con el mundo?
  6. ¿Qué parte de mi infancia aún no se ha sentido suficientemente vista o respetada?
  7. ¿Qué me gustaría pedir y no me atrevo… y por eso grito, me encierro o me defiendo?
  8. ¿Estoy reaccionando a esta situación o a una vieja herida que no ha sanado?
  9. ¿Qué ganaría si en vez de reaccionar eligiera responder con conciencia y desde la calma?
  10. ¿Qué imagen de “hombre” estoy intentando sostener… aunque me duela?
  11. ¿Qué tipo de libertad personal me estoy negando por seguir reaccionando así?
  12. ¿Cuál fue la última vez que me sentí orgulloso de cómo respondí?
  13. ¿Cómo fue la situación y cuál fue mi actuación para obtener mi propia aprobación?
  14. ¿Qué parte de mi sensibilidad he ocultado para sobrevivir?
  15. ¿Y si mi rabia no es más que tristeza con armadura?
  16. ¿Qué pasaría si me permitiera no tener razón?
  17. ¿Cuántas veces al día me obligo a aparentar fuerza mientras me siento roto por dentro?
  18. ¿Qué he aprendido de los hombres que me criaron… y qué quiero desaprender?
  19. ¿Qué estoy esperando que cambie fuera, que en realidad necesita cambiar dentro?
  20. ¿Qué me está enseñando mi incomodidad… si en vez de huir, la escucho?
  21. ¿Qué parte de mí pide ternura disfrazada de tensión?
  22. ¿A quién sigo castigando cada vez que pierdo los estribos?
  23. ¿Qué pienso hacer, paso a paso, para conseguir ser esa persona que deseo ser? Haz un programa bien especificado.

Pero no podemos olvidar a nuestras mujeres. ¿Por qué todavía dividimos las preguntas por sexos? Porque nos guste o no vivimos roles diferentes en muchos aspectos aunque no sean todos y tú decides qué preguntas te resuenan y cuáles no.

Para nuestras «amadas» mujeres

No tengas miedo a profundizar en tu corazón y en tu sentir. No pasa nada ser consciente de tu realidad, todo lo contrario, dará explicación a muchas de tus reacciones y eso te dará la oportunidad de mejorar tu vida.

Nos hemos enfocado especialmente en mujeres madres de familia pero cualquiera que se adjudique la pregunta que le resuene:

  1. ¿Quién era yo antes de convertirme en esposa y madre… y qué queda de ella hoy?
  2. ¿Estoy viviendo mi vida o la que otros esperaban de mí?
  3. ¿Qué parte de mi alma se ha silenciado por estar disponible para todos?
  4. ¿Qué deseo oculto me está pidiendo a gritos que lo escuche?
  5. ¿A qué he renunciado sin darme cuenta?
  6. ¿Qué me está mostrando este cansancio que no he querido ver?
  7. ¿Qué estoy tratando de sostener para que nada se rompa… aunque me esté rompiendo yo?
  8. ¿Dónde se refugian mis emociones cuando no me siento escuchada?
  9. ¿A quién quiero cuidar… y quién me cuida a mí?
  10. ¿Qué haría diferente si supiera que no voy a decepcionar a nadie?
  11. ¿Cuánto tiempo hace que no me escucho de verdad?
  12. ¿Qué necesito perdonarme para volver a quererme?
  13. ¿Cuántas veces al día me trago lo que siento por no generar conflicto?
  14. ¿Qué mensaje me daría mi cuerpo si pudiera hablar sin miedo?
  15. ¿Cuándo fue la última vez que hice algo solo por placer?
  16. ¿Qué me está diciendo esta rutina… más allá del agotamiento?
  17. ¿Dónde quedó mi espontaneidad, mi alegría sin agenda?
  18. ¿Qué relación quiero tener conmigo misma a partir de hoy?
  19. ¿Qué pasaría si me atreviera a pedir ayuda sin sentirme débil?
  20. ¿Quién soy… cuando no estoy haciendo nada por nadie?

Esperamos que esto te ayude y por supuesto si necesitas más:

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